sábado, 9 de febrero de 2019

TRISTEZA

Me quemó con su reflejo cristalino,
hizo surco su descenso en mi mejilla
arrastrando las palabras que callé.
Me llenó de sal los labios,
se mezcló con tu recuerdo
y me atravesó la voz

Y sólo era una lágrima

ENTRAS EN MI VIDA


Entras en mi vida,
y parece que el viento no existiera antes de ti,
ni las flores bordando a versos las primaveras,
ni mis latidos, cargados de razones 
–si la razón no eras tú–.

No sé que tienes, 
y supongo que esa es
la mejor forma de describirte.
Sólo sé, que me hablas,
y se despierta mi piel,                              
tu voz es un copo de nieve
deslizándose en mi espalda.
Que tus ojos, 
me pesan más que el invierno,
y se me quedan las manos sin fuerza
al sostener tu mirada.
Y que sonríes,
y la micra de cordura que aun conservo,
me grita que salga huyendo
en cualquier dirección que no te encuentre,
para que no me pierda…
Pero ya es tarde, 
cuando a mi prisa le entran unas ganas locas 
de besarte lento
…muy lento…
para que no te acabes.


SENTIMIENTOS


Hay sentimientos que te esperan
a la vuelta de cualquier esquina,
y te atracan a corazón armado.
Sentimientos que te sorprenden 
en días llenos de grises,
con explosiones de confeti y flores.
Sentimientos sin nombre,
que se te anudan al pecho
y no se pueden explicar,
que atraviesan el sol 
antes de tocarte el alma,
y cuando lo hacen, 
el suelo tiembla.
Sentimientos que desbordan
y te dejan la cordura a ras de suelo,
que te llevan a volar
por encima de las nubes,
y te llenan la mirada de poesía.
Sentimientos, 
que te ensanchan los pulmones
para que te quepa el miedo,
y te dejan la respiración
en puntos suspensivos…
Sentimientos que consiguen 
que te sientas vivo,
y los mismos, 
por los que morirías.


TÚ Y YO

Mi piel sobre la tuya: magia.
Magia sin trucos,
magia contigo,
magia de ti.

Y los edificios desplomándose,
y tú y yo,
mirando desde la ventana
de nuestro mundo,
viendo como lo normal
se hace añicos